Dicen que cuando National Geografic te contrata como fotógrafo, en realidad no está comprando tus fotografías, sino que está alquilando tu manera de ver el mundo.
En un viaje fotográfico, el objetivo principal es la obtención de fotografias que muestren la esencia de un lugar concreto.
De hecho la fotografía se ha ido convirtiendo, con el paso de los años, en una poderosa herramienta que permite al viajero inmortalizar sus experiencias en tierras lejanas y dar fe de sus vivencias en lugares exóticos junto a culturas diversas.
Para la mayoría de nosotros el recuerdo más preciado de un viaje consiste en un buen número de fotografías cuya calidad nos permita recodar y compartir con los nuestros lo vivido.
Nos llevamos a casa bellos paisajes, hermosos retratos e interesantes instantáneas que reflejen la cotidianidad de un lugar lejano. Con la incorporación de la imagen digital la presencia de la fotografía se ha hecho, si cabe, más popular surgiendo de este modo la necesidad de aprender las técnicas necesarias para dominar el arte de la fotografía.